Tras el fracaso de las negociaciones con parlamentarios de la oposición, el Gobierno ingresó su propio proyecto de retiro de los fondos de pensiones, mucho más acotado y con mayores requisitos que el que este miércoles se aprobó en la Comisión de Constitución del Senado.
Según el texto, que fue presentado esta tarde, el Gobierno fijó un retiro mínimo de 35 UF ($1 millón) y máximo de 100 UF ($2,8 millones), fijando así un límite más estricto que el debatido hasta hoy, de características universales y con un máximo de 150 UF. De igual forma, establece que el retiro debe ser reintegrado de forma obligatoria mediante cotizaciones adicionales.
Sobre los plazos, el proyecto oficialista busca realizar un pago en dos cuotas. La primera, hecha en un plazo de 60 días hábiles desde la fecha de presentación de solicitud y, la segunda, en un plazo de 10 días hábiles desde el primer pago, una decisión que justifican en una acción que busca “proteger los fondos de los cotizantes”.
Respecto al reintegro obligatorio de los fondos, desde el Ejecutivo determinaron que será la Superintendencia de Pensiones quien deberá fijar su mecanismo, realizando un estudio que determine la tasa de cotización adicional correspondiente, por perfil y comportamiento de cada afiliado.
