- Odontóloga y docente de Santo Tomás Viña del Mar advierte sobre productos de bajo precio que no estarían certificados por el Instituto de Salud Pública.
Tener una buena dentadura es el sueño de muchos. Sin embargo, el consumo de cigarrillos, bebidas cola y café con el tiempo provoca que aparezcan manchas en los dientes y la consecuente necesidad de mejorar la estética bucal.
Existen muchas opciones en el mercado: kits profesionales, cintas blanqueadoras, pasta de dientes, hasta lápices blanqueadores y otras alternativas importadas desde países como China, por lo que hay que ser muy cuidadoso al momento de ocupar estos productos.
“Hay algunos blanqueadores que no están certificados por el Instituto de Salud Pública (ISP), por lo que podrían generar un daño mayor. Es un producto químico que se aplica en la boca, por lo tanto, podría haber quemaduras de por medio, entonces la recomendación siempre es realizarlo con profesionales”, explica Romina Bopp, odontóloga y jefa de carrera de Técnico en Odontología mención Higienista Dental del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Viña del Mar.
Según la especialista, lo primero es que un profesional realice un diagnóstico de la salud bucal del paciente. “El blanqueamiento tiene cosas buenas, pero, por ejemplo, los pacientes con sensibilidad previa pueden sufrir bastante esa sensibilidad a los líquidos, a caliente, frío, etc. Además, si los pacientes tienen caries podríamos dañar más o generar molestias que son innecesarias”.
El blanqueamiento dental que se realiza en una clínica consiste en la utilización de un químico que penetra en la estructura de los dientes y los va aclarando. Esto se hace de acuerdo con cada caso. “Normalmente cuando las personas van al dentista por un blanqueamiento, a veces con una buena limpieza los dientes cambian y no necesitan el tratamiento del blanqueamiento. Es importante tener conciencia de que el color de los dientes o el tono va a ser muy individual, es como el color de la piel o el pelo, no todos tenemos un color blanco nieve como sale en los comerciales de la televisión, pero sí podemos tener una dentadura sana, bonita, sin dolores y que nos permita sonreír y relacionarnos de buena manera”, añade la odontóloga.