Según un informe del Ministerio del Trabajo con datos a junio de 2019, los extranjeros representan el 10% de la masa laboral asalariada. Trabajan principalmente en el norte y aunque tienen más educación formal que los chilenos ganan un 22% menos.
El documento del Ministerio del Trabajo muestra que, a junio del año pasado, hay 482.599 trabajadores asalariados con contrato en el mundo privado que no nacieron en Chile. Esto significa que el 10,3% de los 4.223.160 trabajadores con contrato en Chile son migrantes, versus el 3,7% que representaban a enero de 2016. Es más, de los 165.669 nuevos puestos de trabajo asalariados a junio del año pasado, el 80,4%, fue ocupado por migrantes.
“Chile es un país construido por inmigrantes, por lo que resulta muy importante acogerlos y darles oportunidades”, señaló Fernado Arab, subsecretario del Trabajo.
En tanto Juan Pablo Ramaciotti, director de Incidencia y Estudios del Servicio Jesuita a Migrantes, el proceso de regularización extraordinaria señaló a El Mercurio que “fue positivo para quienes no tenían visa y eso ayuda a formalizar el empleo, pero lo importante es que no tengamos que repetir cada diez años estos procesos”.
Según el informe esta política tuvo un efecto concreto: la tasa de empleo asalariado de migrantes subió 58,6% a diciembre de 2018, mientras que a junio de 2019 llegó a 38,1%. Aún así, 8 de cada 10 nuevos empleos fueron ocupados por extranjeros.
“Que el 2019 el 80% de nuevas plazas de empleo asalariado privado haya sido ocupado por inmigrantes no debe interpretarse como que la migración está ‘quitando’ empleo a los chilenos, puesto que la migración ha agregado empleo adicional al mercado del trabajo”.
Por: Aton