Tras coronarse campeones de la Liga Futuro 2019, al ganar a Instituto Abdón Cifuentes en la final.
Felices están los integrantes del equipo de volley del Liceo Max Salas tras culminar un muy buen 2019. Los chicos de la sub 17 cosecharon positivos resultados, dejando en claro la evolución mostrada a través del tiempo: campeones comunales y provinciales de los Juegos Deportivos Escolares durante los últimos dos años, vicecampeones nacionales de la Liga Centro Sur 2018 y ahora, tras ganar a Instituto Abdón Cifuentes en la final, se quedaron con el trofeo de los mejores de la Liga Futuro 2019. Todo se corona con el viaje del plantel a un encuentro deportivo – cultural a desarrollarse en los próximos días en Brasil.
Marco Orellana, profesor de voleibol, da cuenta de cómo los jóvenes han ido mejorando en su rendimiento a punta de compromiso y disciplina: “en la Liga Futuro solamente se presentan clubes deportivos y colegios particulares, acá solo Max Salas representa a la educación municipal lo que da mucho orgullo, son chicos que con esfuerzo y sacrificio han salido adelante y estoy muy feliz por ellos”.
Pero llegar a lo más alto no fue fácil, hoy son los mejores de entre cerca de 10 equipos de la categoría. La final no estuvo excenta de dificultades, perdieron el primer set, teniendo que luchar para revertir el resultado. “Esa es una de nuestras debilidades, no empezar con confianza, pero lo dimos vuelta. Es una buena sensación, siempre tenemos en la mente sacar el primer lugar y vamos con todo, es un nuevo logro para el equipo entero. Estoy contento, es mucho honor representar al Liceo Max Salas y a Los Andes”, declara Jonathan Larraguibel, capitán del equipo.
Todo esfuerzo tiene su recompensa
El ‘profe’ Marco Orellana, explica que Liceo Max Salas suma varias temporadas participando de un intercambio en San Sebastián, donde durante cinco días se enfrentan a colegios y clubes de similares características. “Los chicos trabajan durante todo el año para costear el viaje, luego tenemos una exploración cultural visitando Cataratas de Iguazú y terminando esta experiencia en el balneario de Camboriú”, agrega Orellana.
Benjamín Morales, jugador del equipo, muestra su entusiasmo por la final ganada y por el viaje que se avecina: “es increíble, es el primer campeonato que ganamos, casi siempre quedábamos por debajo de un equipo y ahora somos primeros, es muy bacán. Para Brasil estamos juntando platita envolviendo regalos y que el viaje no nos salga tan caro, para disfrutarlo allá, ir a ganar”.
La familia ha sido fundamental en el apoyo, partido a partido papás, mamás y apoderados los alientan: “desde séptimo básico que están jugando y los estamos viendo, se ha visto una evolución súper grande. Hay harto compromiso, somos involucrados, es bien cohesionado todo”, dice Rodrigo Guerrero, apoderado de uno de los jugadores.
