Capacitación se suma a la que está ejecutando la Cámara Chilena de la Construcción y en la que participan 20 reclusos.
Poco más de tres semanas llevan asistiendo al curso de electricidad domiciliaria un grupo de diez privados de libertad del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe. Los reclusos asisten de lunes a viernes a las clases impartidas por la OTEC Inforem.
Los reclusos participarán en un total de 140 horas de clases, la gran mayoría de carácter práctico. El taller llegará a su término a fines del mes de diciembre y posteriormente los participantes serán certificados, lo que les facilitará poder ejercer lo aprendido una vez que recobren la libertad.
El jefe del CCP sanfelipeño, mayor Brallan Silva, destacó que: “Dentro de la planificación anual que tenemos con el área técnica se determinó conseguir un taller de electricidad para los internos. La idea que tenemos con el área técnica es que todos los talleres y capacitaciones que tengan los internos les sirvan, una vez en libertad, para generar recursos y así mejorar las condiciones de vida de sus familias”.
En cuanto a las temáticas tratadas en las clases, el profesor encargado del taller, Juan Córdoba Jara, afirmó que éstas permitirán que los privados de libertad trabajen sin problemas como ayudantes de electricistas.
“En este instante estamos preparando a los jóvenes con los circuitos básicos domiciliarios, que son los 912, 915,918, 924, que son los más usables. Los alumnos están capacitados para hacer, confeccionar y montar circuitos básicos. Me ha gustado preparar a la gente para que el día de mañana se puedan desempeñar como ayudantes de electricistas”.
Lo idóneo del curso fue confirmado por Germán Bustos, uno de los diez alumnos del CCP.
“Ahora puedo armar un enchufe, hacer una instalación y esto gracias al profe que me ha enseñado. He tenido errores, pero me los ha corregido. Sé que si él me está diciendo que algo está malo tengo que preguntar dónde está la falla y armar de nuevo. Lo mejor sería poder hacer otro curso en la calle”.
A esta iniciativa se suma la que está ejecutando la Cámara Chilena de la Construcción y en la que participan 20 internos.