Por: Patricio Arroyo Jofré / Director Escuela de Pedagogía en Educación Física, Universidad San Sebastián, Presidente del Consejo Académico Nacional de Educación Física
Nos encontramos en un momento épico en la historia del país y creo que nadie quiere quedar fuera de este proceso. Por esto creo que la actividad física, el ejercicio para la salud de la población y el deporte deben tener un valor social superior y el tema debiese ser uno de los prioritarios al momento de redactar la nueva Carta Magna.
El poder realizar ejercicio, actividad física y/o deporte debiese ser un derecho universal, lo que obligaría al Estado a comprometerse con la provisión de espacios públicos y de recursos además de promover el ejercicio como un medio para obtener salud.
Toda persona tiene derecho al acceso a la educación física, al deporte y la recreación, como medio de promoción de salud, de ciudadanía e inclusión. Y es nuestra oportunidad de relevar este tema al debate público, a la reflexión y sobre todo poder escribirlo en una nueva Constitución.
Hay demasiada evidencia científica que demuestra que el ejercicio es algo que cambia vidas, que entrega salud, que promueve la empatía, el trabajo en equipo, que forma ciudadanos íntegros, que ayuda a los procesos de desarrollo cognitivo de las personas y que disminuye los costos asociados a las enfermedades propias de la inactividad.
No podemos quedar fuera. No podemos desaprovechar la oportunidad de normar y de ayudar a que las personas logren integrar hábitos de vida activa en su diario vivir.
El hecho de plasmar lo que necesitamos en una hoja en blanco, nos dará la oportunidad de pensar lo que es beneficioso para todo un país, y créame sr. director que el ejercicio, la actividad física y el deporte son fundamentales.
