Viejito Pascuero y sus ayudantes entregaron regalos a los menores de edad.
Una de las fechas más importantes para quienes se encuentran privadas de libertad es la Navidad. El estar lejos de los hijos y seres queridos hace que esta celebración muchas veces esté lejos de ser sinónimo de felicidad. Para evitar este distanciamiento, en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Antonio las mujeres pudieron compartir con sus retoños.
El festejo se realizó la tarde del pasado viernes en el patio de la unidad penal. Hasta este sector llegaron los niños y niñas, quienes pudieron disfrutar de juegos inflables, pintacaritas, una máquina de cabritas y muchas sorpresas, incluida la llegada de Santa, quien, junto a sus ayudantes, entre regalos y mucha felicidad.
La actividad, autorizada por el jefe del recinto penal, teniente coronel Renzo Sánchez Recabal, fue organizada por el área técnica de la unidad y contó con el apoyo de toda la población penal femenina. Las mujeres privadas de libertad reunieron fondos y trabajaron unidad para hacer de ese día uno muy especial para ellas y sus niños y niñas.
Ángel Herrera fue una de las líderes en cuanto a la organización del evento y durante el desarrollo del mismo. Vestida como pascuera, la mujer privada de libertad afirmó que: “Me ofrecí porque me gustan los niños. Esta experiencia para mí ha sido maravillosa. Tengo dos hijos y no pudieron venir hoy día. Es primera vez que estoy (presa) y ha sido difícil, pero lo he sabido sobrellevar. Al menos a mí me pone feliz a pesar de no estar con mis hijos, ver a otros niños contentos”.
El teniente coronel Sánchez destacó la relevancia que tiene la realización de estas iniciativas.
“Esta actividad se enmarca en las celebraciones de fin de año, en las que destacan las iniciativas de las internas de la sección femenina de esta unidad penal. Ellas se preocuparon de cada detalle de los dulces y vestimentas de la vieja pascuera, que fueron elaboradas por ellas mismas. Estas iniciativas contribuyen a lograr nuestros objetivos institucionales, como, a la vez, bajar los índices de ansiedad y contribuir a la paz social”.
La Navidad contó con el apoyo de diversas personas, entre ellas Juan Recabarren Recabarren, más conocido como “El Farkas de los Pobre” y la alcaldesa local, Constanza Lizana Sierra. Tanto la edil como el filántropo compartieron con todos los presentes entregando amor y cariño.
La alcaldesa sostuvo que: “para la Alcaldía Ciudadana es importante establecer lazos y trabajo en conjunto con el CCP San Antonio y abordar las necesidades de la población penal, en este caso con la femenina alojada en esta unidad”.
Celebraciones de este tipo se repitieron en distintas unidades penales de la región, donde hombres y mujeres recluidos estuvieron en compañía de sus familias.
